Me enamoró tus ganas de vivir, tus promesas, tus te quieros, tus planes de futuro junto a mi, pero sobre todo me enamoró tu sonrisa.
Eras un jodido perfecto, me encantaba todo lo que tuviese que ver contigo, me ilusionaba hasta un simple hola que saliera de tu boca, contigo era completamente feliz, todo era completamente distinto. Si es una locura pero lo cambiaría todo por ti sin pensármelo ni un segundo aunque tú me rechazaras de nuevo.
Bueno probablemente no lo haría, yo creo que hasta aquí he llegado, tengo dignidad aunque a veces no lo parezca, pero... no se puede negar lo innegable.
No hay comentarios:
Publicar un comentario